Por olvidar mi horizonte y sus molinos
por tantas ilusiones
perdidas en tantos desamores
por sentirme inhóspito deshabitado
en el estrecho descanso a las malas costumbres que me aquejan
por la luna estrellada del sábado
que levanté el domingo a la madrugada
para beber el sol de la mañana
con una marea de ginebra que emborrachaba los pasos
quizá por esto y mucho más me debo ser feliz
surgir insurrecto impetuoso en la confluencia de mi alma
para estallar como el jazmín
durante el escancio de las fiestas
así lo prescribe el poeta
en su receta de pájaros y violines *
que anida junto al dolor de su pecho
y acaso recuerde que lo di todo
y todavía no lo suficiente
*Epitafio, Violín y otras cuestiones , Juan Gelman - 1956
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